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Evento de Títeres

Uno de los propósitos de nuestra narrativa es animar a los niños a contar sus propias historias, además de fomentar su creatividad.

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Esta es la razón de ser del evento de títeres el cual se divide en dos partes: Títeres de papel y títeres estilo "Muppet".

"Muppets"

Existen dos títeres de este estilo, ambos basados en personajes de la historia central del Club Callejón: La Maestra Aldebarán y Chilaquil.

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Su función primordial es contarle historias a los niños, ya sean de sus propios orígenes o de folklore mexicano.

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El objetivo de estas historias es que los niños se sientan identificados con la identidad mexicana de las historias y/o inspirados al escuchar las narraciones de superación de la Maestra Aldebarán o el abandono y adopción de Chilaquil.

Títeres de papel

La segunda parte consiste en darles títeres a los niños,

 

Los dibujos representan a los personajes tanto del cómic como perros que salen en el cuento de Chilaquil con Pollo,

Los niños pueden colorearlos a su gusto y luego se les coloca un abate lenguas para convertirlos en títeres.

 

El objetivo es fomentar su creatividad y que ellos también cuenten sus historias, ya sean de su vida o inventadas.

 

Al igual que otros materiales generados, busca facilitar el diálogo y la expresión de emociones por parte de los niños. Además, al poder llevarse los títeres, los niños guardan un recuerdo de Escuela Móvil que los hace querer volver.

Pruebas

El reto inicial fue encontrar la manera de que los niños no se sintieran intimidados por los títeres y que se animaran a usar los de papel para contar historias.

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Tras una serie de pruebas, el día de la transferencia final llevamos una tela para cubrir un lado del pizarrón-ventana del carrito de EM.

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Al cubrir la vista de un lado, los niños entendieron que ellos no eran quienes estaban actuando, sino que estaban controlando a un ente externo a ellos que respondía a lo que ellos quisieran decir.

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Ese día hubo una concentración de niños mucho mayor a otros días, y el objetivo se cumplió: los niños adoptaron a los títeres como una forma de contar historias sin tener que contarlas ellos directamente. 

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